El Independiente Medellín logró un agónico e histórico triunfo de 1-0 ante el Boca Juniors de Argentina, en el partido de vuelta por el Grupo 7 de la Copa Libertadores de América 2003.
De un remate a ras de piso, desde unos 30 metros, el volante David Montoya, logró a los 90 minutos el único gol del partido, que se caracterizó por un ritmo intenso y despliegue de condición física de los 22 jugadores colombianos y argentinos.
El encuentro se disputó ante unos 48 mil espectadores, que colmaron las tribunas del estadio Atanasio Girardot, de la ciudad de Medellín, ubicada en el noroeste de Colombia, a unos 510 kilómetros de Bogotá.
El gol nació de uno de los múltiples aunque desordenados ataques del equipo local, por medio del cual Montoya aprovechó un balón dejado por los zagueros argentinos afuera del área para que hiciera un potente remate a la base del vertical izquierdo, que fue al fondo de la red.
La velocidad y potencia del remate fue de tal magnitud, que el balón pasó por debajo de las piolas y siguió su camino hasta las tribunas, lo que generó instantes de incertidumbre entre los emocionados hinchas locales.
El encuentro fue de mucha presión en el medio campo por parte de
ambos bandos, aunque con un claro dominio del balón por parte de los
anfitriones, quienes sin embargo no tuvieron ideas para avanzar más
allá de las tres cuartas partes de la cancha.
A pesar del ritmo, durante los 45 minutos iniciales sólo se generaron dos jugadas claras de gol, que fueron bien controladas por los arqueros Abbondanzieri, de Boca y González, de Medellín.
En la segunda parte los argentinos salieron más agresivos, recuperaron el medio campo perdido en el primer tiempo y acosaron durante 15 minutos la zaga local, que supo resistir y evitó en dos oportunidades la caída de su arco.
Pero a partir del minuto 20, el partido quedó bajo dominio pleno de Medellín, que también generó su par de oportunidades, sólo respondidas por contragolpes del Boca.
Cuando el partido parecía definido y los hinchas colombianos se encontraban decepcionados por lo que parecía una inminente
eliminación de su equipo, apareció el gol de Montoya.
Incluso, muchos aficionados de Medellín no alcanzaron a verlo, pues ya se encontraban abandonado las graderías del Atanasio Girardot.
Con este resultado, el Boca Juniors perdió su invicto en la presente edición de la Copa Libertadores y ahora se encuentra obligado a arrebatarle puntos a su próximo rival, el Barcelona de Ecuador.
A pesar del descalabro, Boca lidera el Grupo 7 con nueve puntos,
seguido de Independiente Medellín, segundo con seis, y Barcelona de
Ecuador y Colo Colo de Chile, cada uno con cuatro puntos.
Medellín volverá a jugar el 3 de abril próximo en Guayaquil, frente al Barcelona, mientras que Boca Juniors lo hará de visita una semana después, también ante los ecuatorianos.
El juego fue dirigido por el árbitro uruguayo Jorge Larrionda, apoyado en las líneas por sus compatriotas Martín Vásquez y Walter Rial, todos de buena preentación.
Alineaciones:
Independiente Medellín: David González, Ricardo Calle, Felipe Baloy, Amaranto Perea, Roberto Carlos Cortés, John Restrepo, David Montoya, Tressor Moreno (Diego Alvarez) y Mauricio Molina, Carlos Alvarez (William Vásquez), Paulo Diniz (Jorge Serna).
D.T.: Víctor Luna.
Boca Juniors: Roberto Abbondanzieri, Hugo Ibarra, Nicolás Burdisso, Diego Crosa, Clemente Rodríguez, Javier Villarreal, Gustavo Pinto, Matías Donnet (Pablo Jeréz) y Diego Cagna (Sebastián Battaglia), Guillermo Barros Schelotto, Marcelo Delgado.
D.T.: Carlos Bianchi.
|